Presentación

Reflexiones desde un espacio urbano es un recorrido a través de la experiencia de investigación de Carlos Zavarce, es un portal para apreciar las experiencias artísticas y los distintos materiales teóricos recopilados durante su proceso de transito en la investigación dentro del campo de las artes plasticas.


A la par encontraras distintas informaciones y link en su mayoría vinculados con artistas contemporáneos e investigacion

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Soledad


“...para mí la reacción del espectador debe ir más allá del hecho de que está frente a una obra de arte. Debe olvidar que está frente a una obra de arte y tiene que tener emociones que están más próximas a la vida”
Christian Boltanski


“Depresión”, “Cavilación” y ”Contemplación”. Se relacionan a la impresión de sentirse solo en este ancho y ajeno mundo.

“El sentimiento de aislamiento se marca en cada una de las actividades impulsadas por el hombre: rejas, cámaras de circuito cerrado, candados y cerraduras; silencio, alejamiento, extrañamiento, en fin: Soledad”
(Tesis Cristóbal Rojas, Una visión de la soledad . 2000 Carlos Zavarce)


El dolor convertido en una forma latente, implícito en el momento de descubrir la piel, de colocar las formas desnudas, con su sexualidad al descubierto; piel ajada, marcada por el tiempo, huellas impregnadas que contrastan la experiencia. El sufrimiento.

“Se convierte en un proceso mucho más crudo al hacer la contraposición al objeto, al colocarlas sobre las sillas, elemento de reflexión. Están sentadas, obligadas a cavilar, inmersas en ese proceso que produce la angustia, nunca enfrentan al espectador, es un proceso interno, es una fuerza que se concentra, nos desconcentra.”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2000 Carlos Zavarce)


Es la búsqueda de la cohesión de los conocimientos adquiridos hasta entonces, y la necesidad de romper con las estructuras formalistas y académicas. Las peleas constantes de taller por querer prevalecer, mis apenas nacientes juicios estéticos, donde el uso del color, la necesidad de colocarles cabello natural no eran muy bien aceptados. Es para mí un reto la concreción de la serie, y la apertura a múltiples experiencias que me marcan dentro de la realización de las piezas.




El Hombre y el tiempo


“La búsqueda del tiempo, de las marcas, del impacto social que repercute en el hombre, conciencia de ser y estar en esta época”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2000 Carlos Zavarce)

El hombre y el tiempo no es una serie como tal, más bien son experiencias que se van generando dentro de los espacios experimentales del ciclo básico, en la IUESAPAR, con el tiempo lo he podido catalogar como una búsqueda que responde a un mismo orden .

Son diversas piezas que comprenden como eje fundamental la afinidad contextual del hombre dentro de su entorno, relaciones utópicas de la concreción de formas intuitivas encontradas en una ciudad en constante cambio.

“...no busco una forma que deba ser contemplada, por el contrario, creo movimiento, ritmo, represento el sentimiento, cada marca, cada gesto; indago en la expresión, y la impresión en espacios públicos ...”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2001 Carlos Zavarce)

Uno de los valores fundamentales que le doy a este ciclo de aprendizaje es la posibilidad de experimentar el abordar espacios públicos, la comprensión de los áreas externas al instituto, o mejor dicho, la puerta que se abre para poder tomar lugares de transito en la ciudad, la necesidad de apropiación.





Reverdecer

“Concebir una figura adulta saliendo del útero de la razón, formado ya no por ese delicado vientre materno que nos concibe a todos, sino conciliando nuestro entorno como ese espacio de maduración, y nuestro interior como ese lugar donde nos gestaremos.
Contaminados con esas experiencias de una vida urbana y por ende, conciliados por las formas complejas de la sociedad imperante, alimentamos el interior, de toda una estructura urbana que concierta el proceso interno con la percepción final.
Las envolturas que los atrapan son representativas de la rigurosidad cotidiana. Por eso, el interior ha de ser humano. Llegar a sentir la calidez de la forma, el impulso, el sufrimiento, la necesidad de salir, de tener vida, buscar el movimiento.
Pero el nacer no es el final del camino sino el principio de una nueva experiencia, ¿Es acaso que nosotros sólo nacemos una vez, abriendo la brecha a este complejo mundo, o acaso el nacimiento es sólo ese primer paso, cada vez que acumulamos experiencias nuevas nos toca gestar ese cúmulo de conciencias y volcarnos otra vez a la vida? Eso es renacer o reverdecer. Ese es un proceso natural, y aunque nos empeñamos en ser meramente humanos, estamos precedidos por esa concepción natural que nos permite conectarnos con nuestro sentido interior.”
(Textos propios, extraídos del catalogo “Reverdecer, exposición individual 2003)

La búsqueda de formas, uso de materiales no experimentados, la indagación del color, ya no como una capa superficial, externa, sino que sea la piel de la escultura, sin la necesidad de retocarla después. Los materiales que utilizo tienen la condición de fuerza, la calidez. Me interesó el juego perceptivo, ya que las piezas son un cúmulo de experiencias perceptivas.

“Las piezas tienen cierto carácter andrógeno, es la unión entre lo femenino y lo masculino, la búsqueda entre el sentimiento y la razón”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2003 Carlos Zavarce)

Reverdecer es para mí una práctica integral, donde tengo la oportunidad de sentir una multiplicidad de experiencias; es el uso de los diversos formatos, la suma de las posibilidades, experimentación continua, cómo se pueden manejar las nociones de forma.










Enajenaciones

“No hay exterior ni interior, como no hay un mundo frente a nosotros: desde que somos, somos en el mundo y el mundo es uno de los constituyentes de nuestro ser.”
Octavio Paz

Esta serie responde tanto a una necesidad interna como una crítica externa. Es el inicio donde realmente se marca un pauta de reflexión hacia el entorno, hasta ahora ha estado implícita la necesidad de concienciar al hombre y la influencia que ejerce el contexto, pero aquí el entorno se presenta en su medida más agresiva. Realmente se siente el sufrimiento a través de elementos que lo constriñen en dolor.

“Es el hombre que despierta del sueño de la alienación, que comienza realmente a percibir su entornó, razonando entre las perturbaciones, sólo después de concientizarse como ente.
Todo es un proceso psíquico en donde el derecho entre la moral preestablecida y los sentimientos de la nueva moral, luchan por el uso de su propia vida. Trata de un proceso de sentirse enajenado, trastornado, continuamente transformado por el medio.”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2004 Carlos Zavarce)


“La conciencia de los funcionamientos discordantes del pensamiento. Victima en su relación con el mundo; como una idea en el espacio”
(Reflexiones cuaderno de bocetos 2003 Carlos Zavarce)




“El dolor es el camino de la conciencia, y es por él como los seres vivos llegan a tener conciencia de si. Porque tener conciencia de si mismo, tener personalidad, es saberse y sentirse distinto de los demás seres, y al sentir esta distinción sólo se llega por el choque... por la sensación del propio limite. La conciencia de si mismo no es sino la conciencia de la propia limitación.”
Miguel de Unamuno

Esta pieza se llama “yo en-ajeno” su nombre es un juego de palabras, una necesidad de verme en el otro, en lo otro, el inicio de sentirme dentro de esa presencia.


El ser conciente de sí mismo no es fácil. Uno se encuentra perturbado entre el ser y el deber ser. Éstas son sólo formas estructuradas de pensamiento que nos identifican con las diversas posibilidades de relación con el mundo, pero en realidad perdemos los hechos factibles de la vida y dejamos de “ser”. Dejamos de ver la realidad, nos sumergimos en los pensamientos que nos nublan las posibilidades de vivir cada momento de nuestra existencia.

“Cuando comenzamos a merodear en ideas múltiples, divagando en el funcionamiento discordante del pensamiento, saltando entre las ideas, nos olvidamos del cuerpo. Sólo funcionamos desde la inconciencia. Estamos relacionándonos con el mundo a través de nuestro cuerpo sin conciencia de lo que hacemos. El resto es sólo pensamiento. Estamos moviéndonos de forma estática o hablando con los demás sin decir una sola palabra.”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2004 Carlos Zavarce)

Es difícil emprender una relación con el mundo sin pensamiento; tratar de vivir lo que se hace más que vivir en base a lo que se hizo o se tiene que hacer. Estamos acostumbrados a relacionarnos desde la inconciencia, pensando de forma pre-establecida, con el resto del mundo. Es más, nuestra comunicación es mecánica. Estamos comunicándonos continuamente con esquemas prediseñados para abordar esa relación con el mundo, por eso actuamos de forma mecánica y luego no reconocemos muchos de nuestros actos.
“Ser conciente de las formas contenidas en el espacio; se alimenta del entorno; Está observando al espectador, preocupado, obsesionado es un reflejo de lo interno; se consume a sí mismo”
(Reflexiones cuaderno de bocetos 2003 Carlos Zavarce)

Es esa relación con el mundo basada en ideas. Es esa concepción del universo a través del pensamiento y no de la vivencia misma. Abordo ese hombre-idea que no tiene forma de comunicarse sino a través del pensamiento. No ha trascendido para dejar de pensar y ser conciente de su propia existencia, esa forma mecánica de comunicación con el entorno donde lo que importa y centra la atención es su forma de pensar al mundo con la vista perdida. No se relaciona, sólo lo está imaginando. No te observa porque no sabe que existes. Es esa idea nublada que tenemos al existir.

“ideas, razones, pensamientos, perturbaciones, formas atrapadas en un cuerpo sin alma donde el juego del intelequio prepondera.”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2003 Carlos Zavarce)

Las piezas son una experiencia de conjunción de elementos, creación con la posibilidad de insertar elementos que aluden a la constricción de la realidad, como el juego de las texturas y la utilización libre de los elementos compositivos, ordenados como una relación contextual que construyen un discurso. Es el goce de la búsqueda de la crudeza de la reacción a imágenes concretas que expresan toda esa fuerza y fulgor que repudia la utilización de reglas y pautas. Son formas que se encuentran en un grito silencioso como las pinturas de Francis Bacon.

Cuando trato con el sentimiento, la emoción, la relación desde el ente sensible, lo relaciono con el cuerpo de lo femenino encarnando todo lo que es el ámbito senso-perceptivo del ser. En contraposición, cuando hablo de ideas, de relación de pensamiento, de las estructuras de la lógica, lo fusiono con formas masculinas; el hombre se apodera de la razón.


Sobre mi piel


“Solo la experiencia deja marcas tan profundas”
(Reflexiones cuaderno de bocetos 2005Carlos Zavarce)

Separo el cuerpo como materia, trabajo con el hombre como un producto, lo concibo como un exterior sin alma, donde sólo se juega con su superficie, representado por la piel. Es una labor de taxidermia donde transformo la materia cerámica en “piel”.

Es jugar con esa concepción y sus múltiples posibilidades utilizando esa cubierta que nos protege como el reflejo de las deformaciones y procesos externos.

“La piel se utiliza, en esta indagación, como un recurso de tiempo de la presencia de una acción trasgresora sobre la materia, es un recordatorio de lo vivido, por esa razón pretendo desarticular al hombre y desnudarlo, utilizar sólo la piel como un cuero de animal que es destasado y se pretende colocar a la venta. Exhibiendo sus debilidades.”
(Reflexiones cuaderno de bocetos 2005Carlos Zavarce)


Es el uso de la libertad de los materiales, la plasticidad de la cerámica, la calidez otorgada por el horno, donde la pieza conserva eternamente esa sensibilidad. La manipulación de los diversos medios es importante. Poder transgredir el material con mucha libertad rompiendo las tensiones naturales.

El hombre es el reflejo de la experiencia, y entro en la importancia de la noción de la mirada, las piezas parecen vivas, se encuentran cargadas de una característica muy especial que nos permite el reconocimiento, vernos reflejados a través de los ojos



Voz en el silencio

“Las marcas del tiempo nos narran lo vivido en el objeto,
son trazos de lo experiencial”
(Reflexiones cuaderno de bocetos 2004Carlos Zavarce)

Es el despertar de los sentidos del espacio, esta pieza es un encuentro múltiple con diferentes formas de percepción, es aquí donde empieza el sumario de reflexión que me lleva a la pieza del trabajo especial de grado.

Voz en el silencio es la suma de muchas experiencias y a la vez es el inicio para la purificación, empiezo a limpiar todo agregado, llegando a el extracto de una forma pura, representación de mi cabeza, pero cercenada o mejor dicho enterrada en el espacio urbano.

Las piezas son realizadas con una mezcla férrica, que permiten jugar con la oxidación, las calidades logradas en la pieza trascienden a todas las consideraciones anteriores ya que el trabajo adquiere la calidad de otro material, que sobredimensiona su valor, por las implicaciones conceptuales que juegan con las calidades perceptibles.

Es una búsqueda de tiempo, el interés de la exploración de materiales es una constante, no me gusta encontrar y quedarme con una solución única, considero un deleite la exploración de la diversidad, una mirada a la amplitud de los posibles en que puedo transformar un objeto, es más sabroso entrar en el deleite de lo desconocido, entrando siempre en el juego de los placeres visuales y táctiles.

Me gusta pensar que tengo la capacidad de apropiarme de mi exterior, traducir las texturas las formas y las calidades de las cosas a través de la transformación de su sentido y la adecuación a mis necesidades expresivas.

“La conciencia se despierta con la relación de la experiencia, es una función experiencial. Se determina y desarrolla con relación al proceso externo”
(Reflexiones cuaderno de bocetos 2004Carlos Zavarce)

La pieza es un cambio de la percepción, la sensación del movimiento en un espacios que están por debajo de la mirada, además la percepción construye, o completa las formas en transito dentro de ese espacio. En esta pieza encuentro el sentido de la serie, todavía con poca claridad de su importancia pero construyendo con ésta una de las primeras experiencias.


“Yo soy el tú en que me he revertido, tu huella. Tú eres exactamente lo que ha desaparecido desde el momento en que sólo tú encajarías en el molde en que yo me he convertido”
Rachel Whiteread

Hablo desde mi experiencia, pero con el interés de que exista un reflejo en el otro, dentro de una relación contextual que busca el reconocimiento, presentando detonantes de reflexión, traduciendo los elementos de la cotidianidad, aportando mis consideraciones a quien me quiera escuchar




Dame señor la posibilidad de creer y la desesperación de destruirme.

“Lo humanizado y lo seriado en conflicto existencial, son cabezas dispuestas al destino en una reiteración, oración universal donde creemos o nos disolvemos, ojos evidenciando el hastío o la esperanza de una civilización.”
Guillermo Abdala

Grito al cielo, percepción de una realidad concluyente donde el exceso de homogeneidad cansa dentro de los procesos de percepción, estudiando la carga simbólica de la reiteración del elemento y como este pierde su valor individual al pertenecer a un conjunto. Confronto al hombre a su realidad cotidiana.

“El punto de partida es el ser humano, es el principio y el final; centro de todas las cosas:

-La conciencia del ser es entenderse
-El uso de la razón
-como vivir experiencias ajenas
-estamos constantemente recreándonos un mundo que no existe, cuando estamos pensando y cuando pensamos que estamos pensando
-las formas de la conciencia
-el despertar de la razón
-Las formas en el espacio
-crear espacios implícitos en la forma”
(Reflexiones, cuaderno de bocetos 2004 Carlos Zavarce)

La forma de ubicación cambia la pieza; se eleva del suelo, al agregar un nuevo elemento que lo aleja de esa opresión en la superficie horizontal, cambia el modo de percepción.

La forma se aísla, se suspende en el espacio, creo un lugar abierto a la reflexión. El cuerpo de la pieza es luz, se encuentran dispuestos de forma ordenada alineados en espera. Pero inmersos en su propio sistema que termina siendo una constante, una forma única de relación, todos somos diferentes pero nos encontramos inmersos en una concertación social, tácita, entendemos el orden y pocas veces nos atrevemos a subvertir ese modo de relación.

Es importante acotar que cada una de las experiencias que han involucrado la forma de la cabeza como centro del discurso, ha sido totalmente diferente, nunca he utilizado un mismo molde para realizar la reproducción, sino que la limito a la serie que conforma la pieza; es decir, al empezar una pieza distinta retomo la realización de un nuevo molde, y parto de mi cabeza como modelo, para ser transformado, deformado y captar la necesidad en función de la obra




domingo, 30 de marzo de 2014